Mitos de la abuela que aún aplicas…
A tres lunes de que acabe el año hemos decidido hacer un top de mitos que de seguro tu abuela te dijo, ya sea para evitar que te pase algo malo o para asustarte.
“Si haces bizcos y te da un aire te quedas así para siempre”
Uno de los mitos más famosos que las abuelas suelen contar, el aire no tiene ningún efecto negativo en los músculos extra oculares. Si vas a Pachuca y haces bizcos, no te pasará nada.
“Tirar la sal te traerá mala suerte”
Esta es una que hasta la fecha continúa siendo un mito que ha pasado por varias generaciones. Si tenemos la mala suerte de derramar por accidente un salero, la tradición indica que debemos proceder a coger la sal derramada y arrojarla a nuestra espalda por encima del hombro izquierdo, de lo contrario, nos arriesgamos a sufrir engaños y decepciones en nuestras relaciones personales… dicen.
“No te duermas con el cabello mojado porque te vas a enfermar”
Los resfríos son causados por virus, no por el frío ni por dormir con el pelo húmedo. Lo que sí es cierto es que dormir con el cabello húmedo puede causar caspa, además de ser algo incómodo para conciliar el sueño y causar irritación.
“Si te tragas un chicle, se te va a quedar pegado en el intestino”
Lo decía tu abuela, tu mamá, tu tía, pero la ciencia dice que no. Lo único que debes saber es que un chicle no se digiere completamente, pero para nada se queda pegado. El sistema digestivo humano es perfectamente capaz de expulsarlo de manera natural en pocos días. El chicle no se adhiere al estómago ni causa problemas a menos que se consuma en grandes cantidades, algo poco probable.
“No abrir una sombrilla dentro de casa”
Es posible que se deba a motivos prácticos que, en la antigüedad, se asentaron en forma de superstición. Es decir, abrir un paraguas dentro de casa, cuando estos eran especialmente voluminosos, podía causar accidentes. Con el tiempo, este acto se asoció a energías negativas, y de ahí la superstición.
¿Qué otro mito te contaban a ti?